Miguel Alberdi / Decorador

Es el momento de decorar las casas con los adornos navideños para celebrar la llegada de esta tradicional fiesta. Vemos que la Navidad está llegando cuando vemos a la gente adornar las casas, las calles de las ciudades, los comercios etc. Campanas, velas, coronas de muérdago, flores de pascua, estrellas o luces de colores son solo algunos adornos que estas fechas tan señaladas decoran ambientes que nos envuelven en un clima cálido, entrañable, familiar y festivo. Pero es interesante saber el significado de los adornos que colocamos en paredes, puertas y espacios.

Las CAMPANAS que cuelgan de las puertas, ventanas o de las ramas del árbol, representan alegría del nacimiento del Niño Jesús, y de la llegada de la Navidad. Antiguamente se decía que eran usadas para ahuyentar a los malos espíritus, pero hoy su repicar navideño es motivo de alegría.

De todos los árboles navideños cuelgan BOLAS de diferentes colores, más o menos brillantes y algunas con luz propia. La historia nos cuenta que este adorno representa las antiguas manzanas que cuelgan del roble y representa abundancia y el retorno de los espíritus de la naturaleza y fecundidad de la tierra.

La tradición de encender VELAS en Navidad comentan que se remonta a cuando la Virgen María trajo al mundo al Niño a la luz de una vela en el pesebre de Belén. Desde entonces simboliza, precisamente eso, la luz. En las casas se encienden velas de colores, amarilla para el dinero y el trabajo, roja para el amor, azul tranquilidad, verde para la esperanza o blanca para la paz y tranquilidad.

La tradición nos cuenta que sus Majestades los Reyes de Oriente llegaron hasta Belén gracias a una ESTRELLA que les anuncio la llegada del Niño Jesús y les condujo hasta el pesebre, es por eso que las estrellas simbolizan la luz y la esperanza.

Los druidas consideraban el MUÉRDAGO una planta mágica, un remedio universal, dicen que da buena suerte y mucho amor al colocar una ramita.

Las CORONAS navideñas, construidas a base de ramitas y adornos con velas, piñas o lazos o frutas, tradicionalmente se colocan en la puerta de entrada principal o como centros de mesa, y hacen alusión a la vida eterna.

El ÁNGEL fue el encargado de anunciar a María que iba a dar a luz al Niño Jesús. Para otorgarle el lugar que le corresponde suele colocarse en el Portal de Belén y en la cima del árbol de Navidad, simboliza el amor y bondad.

El BELÉN, también llamado NACIMIENTO, es la representación material de las escenas del nacimiento de Jesús y la visita de los Reyes Magos. Las figuras pueden ser de madera, arcilla, cerámica, papel, cartón o barro cocido, decorados de las maneras más variopintas que la imaginación pueda prever.

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