Carlos Gutiérrez, concejal de Juventud e Infancia del Ayuntamiento de Ciudad Real, confiesa que siempre ha intentado pasar la Navidad en familia, con sus padres, hermana, sus primos… Pero que a la vez echa mucho en falta a esos seres cercanos que se han ido yendo. Por eso en su familia intentan que sea lo más recogida posible. “Pero no deja de ser una Navidad nostálgica, aunque también acogedora y entrañable. Evidentemente con el paso del tiempo ha ido cambiando mi visión. Cuando niño las navidades eran sobre todo los Reyes Magos. Pero la verdad es que ahora la disfruto mucho también, porque creo que con la edad se aprende a valorar otras muchas cosas. He aprendido a valorar a los que todavía están a nuestro lado y disfruto de su compañía, pensando que llegarán otras navidades en las que ya no estén”, termina confesando Carlos.
Pero sus navidades son mucho más que eso, porque para él son un auténtico reto por el puesto que desempeña en el Ayuntamiento. “La concejalía se centra especialmente en los niños, de entre cero y 12 años, así como en sus familias. La mayoría de las actividades las concentramos en Jugarama, una de las actividades más importantes que tiene el Ayuntamiento pensando en los niños, junto con la Cabalgata de Reyes. Y esto lo podemos valorar tanto por el número de años que llevamos poniendo ya en práctica esta actividad navideña como por el número de personas que pasan por el pabellón. En los dos últimos años han sido 30.000 personas. Son cinco días muy llenos de actividades, que además coinciden con el corazón de la Navidad, del 26 al 30 de diciembre”, nos confirma el concejal.
“Para este año tenemos la intención de introducir muchas novedades para que los niños se impliquen en acciones como la incapacidad o las cooperaciones internacionales, porque en Jugarama, además de los espectáculos, juegos, actuaciones, teatro y música, intentamos inculcar valores y principios a los más pequeños. También deseo manifestar que esta actividad navideña no sólo es para Ciudad Real, pues esta feria juvenil e infantil se ha convertido en toda una referencia para la provincia e incluso la región, y viene gente de muy lejos a participar”.
Es importante señalar que para una actividad que dura cinco días desde el Ayuntamiento se le dedican casi cinco meses de trabajo, y todo ello contando con la colaboración de más de 80 jóvenes que hacen la función de monitores y se implican en toda clase de talleres y actividades. Por otra parte, y apenas terminado Jugarama, este mismo equipo se centra en ayudar en la cabalgata de Reyes (ya que ésta depende de la concejalía de Festejos), otra de las actividades más esperadas por los niños y sus familias.
“Como resumen, los principales objetivos de estas actividades, sobre todo Jugarama, es que todas ellas sean lo más intergeneracionales que se pueda, que se implique en las mismas toda la familia, ya sean padres, primos o abuelos. Lo que buscamos es un punto de encuentro. Y siempre enfocado desde la solidaridad realizando actividades y dando protagonismo a niños discapacitados para que el resto de los niños empaticen con ellos y se den cuenta de que hay otras formas de vivir, con capacidades diferentes a las suyas”, termina afirmando el concejal de Infancia.
