Ino Crespo, Asesora de imagen
Decidir qué ponerse para much@s es el dilema de cada día. Si le añadimos que nos han invitado a una boda, o, mejor aún, si somos la protagonista, la familia cercana o la mejor amiga de la novia la decisión es transcendental.
Saber qué ponerse puede ser fácil si sencillamente te limitas a tu gusto personal. Empieza a complicarse cuando quieres acertar con la elección para el evento y además te importa la opinión del entorno. Una buena vía para estar más cerca del acierto es saber qué nos favorece realmente, que no siempre coincide con lo que nos gusta.Contamos con multitud de opciones para elegir y una forma infalible para sacar partido de nuestras posibilidades y no fallar, es descubrir qué colores nos favorecen y cuáles por el contrario no realzan nuestra imagen.
Descubrir si tu paleta de color es fría, o cálida, resulta primordial ya que aquella que se ajusta a tus características físicas ilumina el rostro; matiza imperfecciones, como arrugas, venitas y rojeces; atenúa las ojeras y realza la expresión. Por contra, la que es contraria vuelve la piel macilenta, sin brillo, acentuando las imperfecciones y debilitando la expresión.
Cuando se realiza una asesoría de imagen, hacemos el test de los pañuelos, pero puedes hacer una prueba bastante fácil y verás cómo te asombra el resultado:
Prepara dos pañuelos o lienzos de tela uno plateado y otro dorado. Ponte con un espejo en una fuente de luz natural, retira lo más posible el cabello de la cara y bordea el cuello, en torno al rostro, con el pañuelo dorado; y observa si se ilumina y matiza. O, por el contrario, se entristece sacando sombras.
Repítelo con el plateado y, si te quedan dudas, hazlo a la vez, bordea media cara con uno y media con otro, dándole a todo el rostro bien la luz, y comprobarás dos realidades distintas de tu misma cara.
Una vez que descubra si la gama de colores fríos se adecúan mejor a tu imagen, o por el contrario son los cálidos los que te favorecen y realzan, vamos a descubrir a cuál de los cuatro prototipos físicos perteneces. El color es lenguaje, con el juego de un simple tono, la imagen de una persona puede volverse alegre, tranquila, melancólica agresiva o dinámica.
