jueves santo manzanaresLas cuatro hermandades que participaron este Jueves Santo en la procesión de la Pasión de Cristo de Manzanares dieron esplendor a la misma con un total de diez pasos y numerosos cofrades. Como ya ocurrió el año pasado, el buen tiempo y la agradable temperatura hicieron que numeroso público se diera cita en la carrera oficial, que comenzó a las ocho de la tarde en la plaza de la Constitución, a la que las cofradías llegaron desde sus respectivas ermitas y guardapasos. Por quinto año participaron veinte internos de la prisión de Herrera de La Mancha.

La Hermandad de la Oración en el Huerto abrió la procesión del Jueves Santo con el paso de su titular, que fue sobre ruedas acompañado por los nazarenos de túnica morada de terciopelo con capillo blanco de raso. La talla del Divino Cautivo, con el paso “escoltado” por cuatro mujeres con mantilla, fue portada un año más por costaleras de la hermandad, acompañadas por nazarenos con túnica blanca y capirote morado. Tras la banda de cornetas y tambores “Jesús Nazareno” de Membrilla, y junto a nazarenos con túnica blanca y capirote y capa verdes de raso, llegó la imagen de San Juan, que procesionó con ruedas. La estación penitencial de esta hermandad se completó con el paso de palio de María Santísima de la Bondad, llevado por costaleros y acompañado por nazarenas con túnica y capirote de terciopelo verde oscuro y capa y fajín blancos.

La siguiente Hermandad fue la del Cristo en la Columna, como siempre con gran participación de nazarenos de blanco con capa roja y con sus grandes cirios. Estuvo acompañada por su banda de cornetas y tambores de verdugos y por la banda de música «Julián Sánchez-Maroto» de Manzanares. El conjunto escultórico del Santísimo Cristo en la Columna, y el paso de palio de María Consoladora de Afligidos, tallas del imaginero sevillano Luis Ortega Bru, volvieron a conmover a los fieles por su expresividad. Tras el Cristo caminaron varios nazarenos descalzos con grandes cruces a cuestas.

La pujante Hermandad Ferroviaria del Encuentro de Jesús, cada vez con más cantera, contó un año más con el acompañamiento de la banda de cornetas y tambores de la “Virgen del Traspaso” de Manzanares, que lució uniformidad de estilo de policía armada.

Cerró la procesión la Hermandad de la Virgen de los Dolores, junto a la que desfilaron por quinto año veinte internos de la cárcel de Herrera de La Mancha portando al Cristo que preside la capilla de la prisión y que fue tallado por reclusos hace más de medio siglo. En sus “levantás” y cambios de turno recibieron el aplauso del público. Los presos, todos ellos próximos a cumplir condena, desfilaron sin capirote con la túnica blanca y capa negra de la cofradía. Estuvieron acompañados por el Director del Centro Penitenciario, Marceliano García Catalán, por el Jefe de la Unidad Penitenciaria de la Guardia Civil de Herrera de La Mancha, así como por el Capellán del centro, y por el alcalde de Manzanares, Antonio López de la Manzanara.

El paso del Cristo de la Humildad, junto a su ya tradicional acompañamiento de un trío de viento, dio paso a la Virgen de los Dolores junto a la banda de música “Santa Cecilia” de Bolaños y a nueve mujeres con la clásica mantilla. La comitiva la cerraron la presidencia religiosa, a cargo del párroco de la Asunción, Secundino Martínez Rubio; y miembros de la Corporación Municipal.