La borrasca Filomena provocó que la vuelta al colegio tuviera que prolongarse durante varios días debido a la nieve y heladas caídas durante el paso del temporal por la zona. Por ello, desde la consejería de Educación de la JCCM se tomó la decisión de suspender las clases en la comunidad hasta el 13 de enero. Una gran mayoría de carreteras se tuvieron que cerrar y las calles estaban intransitables.

La propia consejería pidió a los ayuntamientos que durante el cierre de aulas se revisara el estado de las instalaciones, principalmente por comprobar si se han visto afectadas por los efectos de las intensas nevadas y heladas.

En este caso, desde el Ayuntamiento de La Solana, Eulalio Díaz-Cano, primer teniente alcalde y concejal de seguridad, ha coordinado las tareas para mantener limpias de nieve o hielo tanto las zonas de acceso a los centros educativos como en el interior del mismo, para posibilitar la movilidad del profesorado y alumnado.

Díaz-Cano, informa que durante estos días se ha estado poniendo todo a punto, “con el objetivo de que la vuelta a  los centros educativos de la localidad sea en las mejores condiciones”. Se ha hecho una revisión de los sistemas de calefacción, procediendo a su encendido y comprobando que todo estaba en perfecto estado.

Además de esto, los servicios municipales permanecen atentos y con seguimiento de las posibles heladas para esparcir sal, principalmente en las entradas de los centros educativos, así como en las zonas más transitadas por el alumnado, como por ejemplo en la Avenida Alcalde López Posadas y en las inmediaciones del resto de colegios.