Pedro Martínez Díaz es el Hermano Mayor, desde el mes de mayo de 2001, de la Real y Muy Ilustre Hermandad de la Oración en el Huerto de la capital. (Real porque el rey Felipe VI es Hermano Mayor Honorario desde que era príncipe de Asturias). Hasta esa fecha, Pedro Martínez había sido un hermano más sin haber formado parte de ninguna junta directiva ni haber tenido cargo alguno, aunque pertenece a la hermandad desde que tenía cuatro años siguiendo la tradición de su padre y abuelo. Al actual cargo fue propuesto por el anterior Hermano Mayor, Vicente García Minguillán.

Semana Santa, el Viernes Santo, es sólo un día más para esta hermandad”

Pregunta.- ¿Qué funciones tiene un Hermano Mayor?
Respuesta.- Estar pendiente, durante todo el año, de que las cosas salgan bien y no sólo el día de la procesión.

P.- ¿Cuáles son esas cosas que se hacen a lo largo de todo el año?
R.- Nada más terminar la procesión del Viernes Santo empezamos a preparar la Cruz de mayo, que este año será menos de un mes después de Semana Santa. Posteriormente preparamos el Corpus. A continuación participamos en La Pandorga. Preparamos cursos de dibujo y fotografía para la Cuaresma. Hacemos también un “Triduo”, y organizamos algún viaje. Todos los meses tenemos alguna actividad. La hermandad no para en todo el año. Semana Santa es sólo un día más para esta hermandad. Es importante, pero no el más importante. Lo son más, por ejemplo, las obras de caridad que hacemos ya que colaboramos con la parroquia, con Cáritas y con diversas ONGs.

P.- ¿Qué hace exactamente la hermandad durante la Semana Santa?
R.- Dedicamos unos días a preparar todo lo necesario para la procesión, ya que somos una de las hermandades que más hermanos sacamos a la calle, por detrás, claro está, de La Pasionaria. Nuestra salida es el Viernes Santo por la mañana. Salimos a las 10,45 de San Pedro, somos los primeros de las cinco hermandades que desfilan. Vamos en cabeza.

P.- ¿Cuántos hermanos son?
R.- Alrededor de unos mil pero en la calle venimos sacando a unos 200.

P.- ¿Por qué no salen los 1.000?
R.- Porque no todo el mundo tiene túnica…, bueno, y por otras muchas cosas. Últimamente muchas personas se van fuera durante esos días y por otra parte no a todo el mundo le gusta procesionar. Pero pese a ello, como he dicho antes, sacamos a muchos a la calle, entre ellos a niños. Cada año hacemos unas diez túnicas que vamos dejando a los hermanos de forma que  ya llevamos unas 80. El hecho de que la túnica sea gratis, pues hay personas a las que económicamente les resultaría costoso adquirirla, facilita la participación.

P.- Y el resto del año, en las demás actividades, ¿participan los 1.000?
R.- Sí y no. Evidentemente los 1.000 no pasan por todas las actividades, pero unos van a unas y otros a otras. Hay actividades que concentran a más hermanos y otras a menos. Pero como media podemos decir que entre doscientas y trescientas personas pueden participar en la mayoría de las actividades. Por ejemplo, cuando muere un hermano se suele acudir en gran número. También es verdad que hay muchos hermanos que pagan la cuota y no hacen más. Claro que es una cuota muy baja, 10 euros al año.

P.- ¿Cómo es su vestuario y cuáles sus imágenes?
R.- Vestimos de morado y granate. Capa y cinturón granate, túnica morada, guante blanco, calcetín blanco y sandalia negra. En cuanto a las imágenes tenemos a Jesús orando en el huerto, que es el titular, el Ángel, San Pedro, Santiago y San Juan. En total cinco. Estas imágenes procesionaron por primera vez en 1946 ya que tuvieron que tallarse de nuevo al haberse destruido las anteriores durante la guerra civil.

P.- ¿Hasta dónde se remonta la historia de esta hermandad?
R.- Hasta el Santo Crucifijo, del año 1599, aunque la hermandad como tal se fundó en 1688 debido a la falta de cofrades para sacar a la calle las imágenes del Santo Crucifijo. En 1599 procesionó en San Pedro con Las Tres Cruces, la Coronación de Espinas, El Encuentro y Jesús Caído. Con el tiempo estas imágenes se fueron restaurando y sustituyendo. Esta hermandad ha tenido en total tres “misterios”. (Se entiende por misterio a un grupo de imágenes, cuando hay más de una). El original, otro que existió desde principio del siglo XX y que fue el que desapareció durante la guerra, obra de Venancio Marco, y el actual, que es el que mayor valor artístico tiene, obra de Luís Marco Pérez.

P.- Otra faceta importante de esta hermandad es que cuenta con Hermanos Mayores Honorarios. ¿Quiénes son?
R.- El Rey Felipe VI, desde que era príncipe, el Obispo Emérito Rafael Torija, ASAJA, Globalcaja, y el anterior Hermano Mayor, Vicente García Minguillán Lara. Son honorarios porque la hermandad los distingue por haber destacado en algo. El rey destaca precisamente porque aceptó ser hermano cuando se le propuso dándose el caso de que sólo puede ser hermano de una hermandad, así que esta es la única de España que lo tiene. Fue una idea del anterior Hermano Mayor, Vicente García Minguillán.

P.- Pero además, esta hermandad fue la primera que admitió mujeres, ¿es así?
R.- Exactamente. Tanto en la Junta como vistiéndose. Aquí se admitieron porque pensamos que la mujer es igual que el hombre. Se tuvo muy claro desde el primer día. Fue hace unos 35 años. Fue la primera en admitirlas y en tenerlas como directivas en la Junta.

P.- ¿Qué actividades hace la mujer en la hermandad?
R.- Lo mismo que el hombre. Se viste, puede ser Hermana Mayor, secretaria, tesorero…, puede tener los mismos cargos y obligaciones. De hecho la hermandad tiene en estos momentos algunas mujeres más que hombres, pienso que unas cien más. Además las mujeres son más participativas que los hombres. Las veo más valientes para todo. En la Junta también hay más mujeres que hombres. Y también intervienen como costaleros. Es verdad que al ser menos fuertes pueden participar menos, pero las que tienen fuerza lo hacen igual o mejor que los hombres.

P.- ¿Cuál es el papel que desempeña una hermandad en la sociedad? ¿Cómo se integra en ella?
R.- En principio funciona como cualquier otra sociedad cultural o deportiva. Su característica es que es religiosa y depende del obispado de acuerdo con estatutos que supervisa la Iglesia. Por tener este carácter religioso una de sus principales actividades es ejercer la caridad con donativos, tanto grandes como pequeños, sin discriminar a nadie. La Asociación contra el Cáncer, la Cruz Roja, Médicos Sin Fronteras o Cáritas son algunas de las instituciones con las que colaboramos.

P.- Esa religiosidad que la identifica ¿se manifiesta a lo largo de todo el año o sólo en Semana Santa?
R.- Intentamos que quienes pertenezcan a esta hermandad sean religiosos. De hecho exigimos que estén bautizados y confirmados y que cumplan en lo posible con la religión. Pero está claro que tampoco podemos obligar a nadie ni vigilar en lo que no deja de ser su vida privada. Pero sí intentamos que se impliquen, aquellos que lo deseen, en actividades como la catequesis y otros actos religiosos. Todo dentro de las normas que nos dicta la Iglesia.

P.- ¿Cómo ve usted la Semana Santa? ¿No cree que hay mucho de actividad turística? Al menos así lo intentan vender muchas instituciones civiles.
R.- Sí. Eso pasa con frecuencia, pero nosotros intentamos que en la nuestra eso no ocurra. Se prohíbe totalmente que los hermanos hablen en la calle, que no se dirijan a los espectadores, exigimos que mantengan el orden, los costaleros deben rezar en la iglesia antes de salir…, en el caso de nuestra hermandad no consentimos que se pierda la religiosidad y el orden que debe haber en un acto que para nosotros es totalmente religioso.

P.- ¿Cómo es la relación de las hermandades entre sí?
R.- No es mala. Podía ser mejor, pero en realidad el único conflicto que se plantea es el de los recorridos. A nosotros nos gustaría tenerlo más largo, es muy corto, pero en conjunto nos llevamos bien. Como en nuestro caso somos cinco hermandades las que procesionamos a la vez, decidimos por mayoría, lo que digan tres de ellas se hace.

P.- Finalmente, algo que desee manifestar a las personas que desconocen lo que es una hermandad.
R.- Recomiendo que se pertenezca a una hermandad porque se conoce a mucha gente, se hacen nuevas amistades y se aprende también lo que es la disciplina.

Pedro Martínez Díaz